Cuando hablamos de brecha de género en el sector TIC, son diversos los datos que apuntan hacia estas desigualdades que afectan a lo largo de la formación y desarrollo profesional de las mujeres. Esto no es algo nuevo, ya conocemos esta realidad que, entre otras cosas, da razón de ser a iniciativas como WomANDigital.
Pero aquí y ahora, nos gustaría enfocarnos en la perspectiva de las oportunidades. Es necesario realizar una prospección y mirar hacia adelante, enfrentando los retos del hoy y del mañana, con la mirada enfocada en las rutas hacia la igualdad de oportunidades.
Y es que las nuevas tecnologías, y toda la revolución que suponen para la vida y economía, son y serán un escenario idóneo para liderar el impulso del papel activo de la mujer en el ámbito profesional.
¿Por qué la ciencia y la tecnología?
Son “nuevos tiempos”, y se precisan de nuevos valores socio culturales. Y con esto queremos decir, que los modelos familiares también están cambiando, y deben cambiar más para avanzar hacia la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Esta denominada nueva revolución digital marca así el punto de inflexión, que ha hecho patente la necesidad de la incorporación de talento femenino y las condiciones para hacerlo bien.
La formación STEM aumenta la tasa de empleabilidad de las mujeres en España en un 13%
Porque las STEM y el sector TIC llegan ya a todos los ámbitos, dada su transversalidad como clave para el progreso social y económico.
Más del 80% de las trabajadoras del sector tech están satisfechas con su concliación laboral y familiar.
El 89% de las mujeres que han apostado por el sector tech compagina mejor su vida personal, familiar y laboral que en su sector anterior.
Porque gracias a la tecnología es posible trabajar en remoto, conectar un mundo globalizado y deslocalizado, internacionalizar empresas desde una oficina o incluso desde tu casa, crear equipos que trabajen por fases permitiendo la flexibilidad de sus tiempos y adaptaciones de sus jornadas… Y así, optimizar recursos, ganar eficiencia y, sobre todo, avanzar en condiciones que apuesten por la igualdad de oportunidades basada en criterios de conciliación y corresponsabilidad.
El 85% de las emprendedoras españolas apuesta por la tecnología
Observatorio de la Digitalización 2024 de GoDaddy
Se trata pues, de la implantación de una serie de buenas prácticas en las empresas que, en las profesiones científico tecnológicas cuentan con un “espacio propicio” que ofrece todo un marco de oportunidades para fomentar e impulsar el rol activo de las mujeres a todos los niveles: desde el técnico hasta los puestos de liderazgo y toma de decisiones y, por supuesto, en el ámbito del emprendimiento.
El talento femenino, clave para el desarrollo justo
Ada Lovelace, considerada la primera programadora de la historia; Teresa de Pedro, desarrolladora de uno de los primeros sistemas de inteligencia artificial de nuestro país; Lucia Specia, pionera en los enfoques basados en datos para el procesamiento del lenguaje; Fei-Fei Li, figura destacada de la Inteligencia Artificial y de la diversidad en las funciones STEM y de la IA… y una larga lista de mujeres que están configurando la historia.
Así, la igualdad de género es una de las dos Prioridades Globales de la UNESCO que “se ha comprometido a garantizar que las mujeres y las niñas tengan acceso y participen plenamente en los desarrollos tecnológicos, incluidas las tecnologías de frontera, libres de prejuicios sexistas” y señala a la IA como vía de avance al respecto, concienciando sobre la “importancia de adoptar un enfoque de género en todos los aspectos de la IA” alineado con la Recomendación sobre la Ética de la Inteligencia Artificial.
Y vamos bien encaminados: según el Mapa de empleo de Fundación Telefónica, las profesiones que han experimentado mayor avance en cuanto a representación femenina son Desarrollo o Programación de Software y Digital Project Management.
De esta forma, se concibe que la igualdad de género en las STEM y las TICs, es sinónimo de respeto por la dignidad, de la protección de la diversidad y de la inclusión, y la tecnología la gran aliada para promover la justicia social y la equidad.