En el corazón de muchas zonas rurales de Andalucía, el acceso a la tecnología sigue siendo desigual y limitado, especialmente para las mujeres. El reto crece cuando, en estos territorios, la brecha digital se cruza con la brecha de género, generando una barrera doble que reduce las oportunidades de desarrollo personal, profesional y social de muchas mujeres.
Esta realidad no es nueva, pero sí urgente de atajar. Ya en 2015, el informe “Mujeres Rurales Emprendedoras y TIC” del Instituto de la Mujer, apuntaba que, la falta de infraestructuras digitales, formación y visibilidad, junto al peso de los estereotipos de género, limita la participación plena de las mujeres rurales en la sociedad digital, perpetuando modelos de dependencia económica y aislamiento social. Por ello, este mismo organismo ha puesto en marcha la iniciativa Desafío Mujer Rural la cual, cofinanciada por el Fondo Social Europeo, promueve el emprendimiento y la consolidación de empresas de las mujeres que viven en el medio rural, impulsando la innovación y promoviendo la competitividad de sus proyectos empresariales.
El informe Emprendedoras rurales en España. Análisis con datos GEM 2021-2022, analiza en uno de sus capítulos, la adopción de las tecnologías digitales en los negocios de las emprendedoras rurales para observar cómo se adaptan a este futuro más digital y si éstas contribuyen a mejorar las oportunidades emprendedoras en el ámbito rural.
El 36% de los negocios de las emprendedoras rurales planificaron la implementación de una serie de tecnologías digitales antes de la pandemia de coronavirus, y un 34% afirmaron que podían funcionar sin tecnología digital.
Atendiendo a la fuente de obtención de ingresos de sus negocios, sólo el 14% de las emprendedoras rurales obtienen entre 76% y 100% de sus ingresos gracias a los medios digitales que utilizan o que han implementado.
Pero este no es un relato de resignación. Es una historia de transformación. De mujeres andaluzas que, a golpe de formación, innovación y tecnología, están rompiendo moldes y conectando sus pueblos con el futuro.

TECNOLOGÍA COMO ALIADA: EL PROGRAMA “PREPARADAS”
Impulsado por la Junta de Andalucía, el programa “Preparadas” ha sido un punto de inflexión. En solo dos años, más de 59.000 mujeres han sido formadas en competencias digitales básicas y avanzadas en pequeños municipios andaluces. Desde aprender a usar un correo electrónico hasta manejar herramientas de marketing digital, estas formaciones están empoderando a mujeres de todas las edades para emprender, trabajar, comunicar y crear en entornos hasta ahora desconectados.
“RURAL Y FEMENINO”: LIDERAZGO QUE TRANSFORMA
Desde la Asociación para el Desarrollo Rural de Andalucía (ARA), el proyecto “Rural y Femenino” está visibilizando historias de mujeres que han convertido sus ideas en negocios con impacto local y digital.
Estas mujeres no solo están creando empleo, riqueza y sostenibilidad en sus pueblos, sino que están demostrando que la digitalización no es solo cosa de las ciudades.
COAMUR: FORMACIÓN EN COMPETENCIAS DIGITALES
La Coordinadora Andaluza de Organizaciones de Mujeres Rurales (COAMUR) ha implementado programas formativos en competencias digitales, incluyendo comercio electrónico, marketing digital y liderazgo. Estas iniciativas han permitido a mujeres rurales adquirir habilidades clave para emprender y gestionar negocios en el entorno digital.
CONECTADAS PARA EMPRENDER: EL PROYECTO “DIGITALIZADAS”
Desde el programa Digitalizadas, impulsado por Fundación Cibervoluntarios, Fundación Mujeres y Google.org, se están visibilizando trayectorias de mujeres rurales que han convertido el aprendizaje digital en una herramienta para emprender, comunicarse y acceder a nuevas oportunidades. Con más de 25.000 participantes en toda España, muchas de ellas andaluzas, este proyecto demuestra que cuando se combina tecnología con formación accesible, el medio rural se llena de iniciativas con impacto local y mirada global.
FADEMUR Vuela: Formación en pilotaje de drones para mujeres rurales
La Federación de Asociaciones de Mujeres Rurales (FADEMUR) ha lanzado el programa FADEMUR Vuela, centrado en la formación de mujeres rurales andaluzas en el pilotaje de drones. Este curso, que ya ha capacitado a 30 mujeres en Andalucía, no solo representa un avance en términos de igualdad de género, sino también un paso hacia la modernización del campo andaluz. Las participantes adquieren habilidades técnicas que les permiten aplicar tecnologías avanzadas en sus explotaciones, mejorando la eficiencia y sostenibilidad de la agricultura local.
PIONERAS DE UNA NUEVA RURALIDAD
Muchas de estas mujeres están explorando caminos innovadores: drones para agricultura inteligente, plataformas de e-learning para artesanas, apps para gestión ganadera, espacios coworking rurales… Lo hacen desde lo local, pero con mentalidad global.
Y lo más importante: están sirviendo de referente para otras jóvenes que ya no ven la necesidad de irse para encontrar oportunidades, sino que apuestan por transformar su entorno desde dentro.

Ejemplo de ello es Soraya Pujol (Sevilla), galardonada en la octava edición del programa GIRA Mujeres por su proyecto Floresta Sur, un vivero forestal que promueve la inclusión sociolaboral de mujeres víctimas de violencia de género. Este proyecto destaca por su enfoque en la sostenibilidad y el uso de herramientas digitales para la gestión y comercialización de productos forestales. Soraya ha enfatizado la importancia de la tecnología como herramienta transformadora para las mujeres emprendedoras, permitiendo la creación y consolidación de negocios liderados por mujeres en sectores emergentes como la digitalización y la economía circular.

Ejemplo de ello es Soraya Pujol (Sevilla), galardonada en la octava edición del programa GIRA Mujeres por su proyecto Floresta Sur, un vivero forestal que promueve la inclusión sociolaboral de mujeres víctimas de violencia de género. Este proyecto destaca por su enfoque en la sostenibilidad y el uso de herramientas digitales para la gestión y comercialización de productos forestales. Soraya ha enfatizado la importancia de la tecnología como herramienta transformadora para las mujeres emprendedoras, permitiendo la creación y consolidación de negocios liderados por mujeres en sectores emergentes como la digitalización y la economía circular.
DE LA DESCONEXIÓN A LA REVOLUCIÓN DIGITAL, EN FEMENINO
Estas iniciativas son más que acciones puntuales. Son movimientos de transformación social, impulsados por mujeres que han entendido que el acceso a la tecnología es también acceso a los derechos, a la independencia y al futuro.
Andalucía rural está cambiando, y muchas de sus protagonistas tienen rostro de mujer, teclado en mano y mirada decidida. No están esperando a que llegue la oportunidad: la están creando con conexión, con formación y con liderazgo.
Porque cerrar la brecha digital en clave de género no es solo una tarea pendiente, es una oportunidad para transformar territorios enteros con igualdad, innovación y arraigo.